querido gabriel,trasegando con esta perra vida -y sus dulces ojos- y siempre el viento,la luz,el amor de pocos y a menudo lejos -muy cerca-las piedras del abismo,el ala...esta vida pequeña que insiste en mí,con su rincón,su encono ¿qué habría de hacer con esta vida?¿ofrecer la sal de las ciudades vencidas?ocultar su lámpara? [ muchos encuentran soluciones,se reclinan,medran]...ah,y pensar... hubo una hora en donde la llanura mostraba-solo para mí,solo para mí - la vigilia de los aguiluchos y un río inconquistable;suave como la lengua madre era el tiempo y casi recto,amable...
sí,
cómo estás,
decís
y qué? y qué?
remoto compañero
en estas calles tristes de belleza
debiera hundirme en un espejo santo y saludar
muy cortésmente
a todos, a todos
crecer (no importa hacia qué lado... dijeron los reyes, que no importa)
andar feroz
ser otro
te abraza (como si fuera nuevo,rarísimo el espacio entre nosotros)
alejandro
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