sábado, 31 de diciembre de 2016

el ángel que te agota




y ya remontando el corazón
llama hacia el fondo
un río de tinieblas

el ángel que te agota
aparece en el puente dorado

todo lucha


todo es lejos.

jueves, 29 de diciembre de 2016

PERROS Y GATOS SURREALISTAS



LOS PERROS DE ASNIÈRES


Entierran a los perros entierran a los gatos
entierran a los caballos entierran a los hombres
entierran las esperanzas entierran la vida
entierran el amor, también a los amores
entierran en silencio al silencio
entierran en paz a la paz
la paz,la paz más profunda
bajo una capa de pequeños guijarros multicolores
de conchillas y de flores multicolores

hay tumbas para todo
con tal de esperar
viene la noche viene el día
con tal de esperar
el Sena desciende hasta el mar
pero la isla inmóvil no desciende
el Sena remontará hasta su fuente
con tal de esperar
y la isla navegará hasta el Puerto de  Salvación
con tal de esperar

entierran los perros entierran a los gatos
dos especies que no se quieren


Raymond Quenau (Francia, 1903 -1976)






LOS GATOS QUE MIRAN


Los gatos que miran a los pájaros
tienen ojos que piensan
los pájaros que miran a los gatos
tienen ojos que dudan
los míos se cierran
para meditar sobre los milagros.



Francis Picabia (Francia, 1878 – 1953)



las versiones son de Aldo Pellegrini (1903 - 1973)



martes, 20 de diciembre de 2016

invisible



no había sido una colonia penal la isla de Patmos?
no lo fue después?


barcos oscuros como el día
incansables

qué define las cosas?

una mosca muriendo en la ceniza
 es en torno a la cosa en sí ¿matemática?
¿ensueño?

se crían estos pasos
 de nadie a nadie resurrectos

no sé por qué un día comencé con el silencio
la poca luz

cada uno desmiente su estatura

 majestuosamente en las antípodas
lo invisible halla gusanos

primero: ubicar el dinero
segundo: la soledad

costas seguras de su tinta
donde un solo ángel
abre el pozo
por mil años.




jueves, 15 de diciembre de 2016

Política general según Henri Michaux :



Desfamiliarizarse. Desnacionalizarse. Desacondicionarse. Deshumanizarse.

Consigna de Michaux : Tomar aire en todas partes donde sea posible. Sálvese quien pueda.



Los desarzonados - Último Reino VII - Pascal Quignard - el cuenco de plata -Buenos Aires - 2013

martes, 13 de diciembre de 2016

Una entrevista de Fabián Soberón para Los Andes

Alejandro Schmidt propone versos que mezclan la afirmación rotunda y la elipsis expresiva.
Materialista y simbólica, escéptica y directa, la poesía de Alejandro Schmidt aletea desde hace décadas en el aire argentino. Con ritmo seco y escansiones virulentas, con un vocabulario coloquial y expresionista, el poeta cordobés Alejandro Schmidt propone versos que mezclan la afirmación rotunda y la elipsis expresiva.

A lo largo de los muchos años, Schmidt ha publicado decenas de libros que circularon, dispersos, por los curiosos anaqueles de los lectores ávidos y entusiastas. En el 2013, la editorial nudista reunió poemas de diferentes libros y compiló una antología fundamental. Schmidt, contundente y siempre lírico, expresa sus ideas acorde con el ritmo trepidante, pesimista y esperanzado (valga el oxímoron) de sus versos.

Su poesía y su palabra atacan la vida y muestran su corazón (el zumo del dolor) desde una perspectiva a la vez desencantada y vitalista. Para Schmidt, el arte y la poesía no son meras formas abstractas sino que hunden su sustancia en el pozo de la vida, y, desde ahí, esa “señora”, la poesía, lo alza sobre el mundo y lo suelta para que él de un testimonio encendido, expresionista y visceral.


–¿Por qué ha persistido en escribir poesía? Pienso en los muchos libros y en los muchos años de lectura.


–¿Por qué vuelven ciertos pájaros golpeados de la luz? ¿Cuál es el valor del testimonio y el testigo, en W. Benjamin? ¿Qué entendió –entre otros – Foucault por “autor”? Persisto por la inocente felicidad de lo imposible, la curiosidad, la  certeza de una estrella más o menos benévola en mis días. Agrego la idea de destino que es anagrama de “sentido”. ¿Por qué ha persistido la poesía en volver, a lo largo de medio siglo, a un más acá de mí?


–Encuentro estos opuestos en su poesía: materia y símbolo, miseria y breve trascendencia del signo. Por momentos, la palabra es un tumba, una ascesis terrenal hacia el barro y una forma mustia de leer el dolor o el más allá. ¿Usted ve opuestos en su poesía?

–En poesía y existencia  siento la presencia de dobles (alucinación, sombra, religión o metafísica, poco importa  el orden o la entomología de lo imaginario). No encuentro nada opuesto, siento, más  bien, todo complementario, de la cicatriz: la herida como decir, de la injusticia la memoria o del instante lo eterno. Lo que llamamos lucha, contradicción, contraste es, a menudo, estricta confusión.

–Casi como si fuera Kant, usted siempre vivió de forma permanente en una ciudad “corta”: “como cuando era /muy joven/siento que nunca podré irme” (“Aquí”, 1996). ¿Cree que su poesía está ligada a esa ciudad “corta”?

–Villa María es “corta” porque todo lo es en la llanura. No siento que mi poesía esté ligada a la experiencia de esta ciudad. Vivir aquí me ha permitido acaso una mayor concentración en la escritura debido a la carencia de estímulos espirituales o intelectuales .Villa María es un centro comercial y de tránsito, de poca identidad.

–Junto con el escepticismo que hay en los versos, hay también una forma expresiva de contar y cantar el abandono, el dolor. Por ejemplo: silba/insiste/llama a su perro// si una vez/ una sola vez/hubieran llamado así/a mi corazón” (“El jorobado”, 1998)…

–Solo el desamparo, el dolor, la falta, el resto, se cantan, se cuentan…lo demás, generalmente se agota en el vivir, digamos, en la superficie de la especie o… en la prosa.

–“Estoy conforme/no quiero que nadie me dé nada/solo abran las puertas del infierno”. Ese hombre de la “escuela industrial” vive en una especie de desierto de la esperanza. Ese tono, esa música recorre, creo, su poesía. ¿Podría hablar de esto?

–Y caminaré hasta las pezuñas de oro/mojado por la memoria de la eternidad/… continua ese poema, y ahí se cifraría una respuesta, el no pedir, no esperar y la memoria, la eternidad como valores salvíficos. Creo que he pecado de excesiva esperanza en vida y obra, el complemento entonces, serían tantos momentos elegíacos ¿no? aparte de su efectividad como recurso lírico.

–“Aún leo para aprender a vivir”, dice el poema “Colmillos”. ¿Cómo es la ecuación (si acaso hay ecuación)? ¿La lectura ayuda a vivir? ¿La poesía rompe la vida?

–La lectura  del canon espiritual me ayuda a vivir; vuelvo a la Biblia, los estoicos, a los grandes escépticos (que son los grandes moralistas) siempre. Mi primera infancia en un seminario luterano, la temprana muerte de mi padre (profesor, traductor y sacerdote) son geometrías de este aprender, este vivir. Adscribo al difuso, intenso ideal del Romanticismo, por lo tanto sí, la poesía, debería romper la vida, para saber qué hay detrás de esa ingente máscara: lo Real.

–Entre los muchos libros publicados hay uno que se llama “Videla”. Ese libro entreteje los versos y la política. Para usted, ¿cómo es la relación en ese binomio?

–En Videla intenté testimoniar algunos matices, algunas  consecuencias de la dictadura, esta mirada al sesgo suscitó malentendidos varios, denuestos, enigmas… fue un ajuste de cuentas contra cierta comodidad de la simplificación, la demagogia y los negocios de la memoria.

–Sus versos no son autobiográficos, pero hay algunos poemas que refieren las figuras de su padre y de su madre. Hay un libro que se llama “Mamá”. ¿Podría hablar de las relaciones entre biografía y poesía?

–Coincido, no son autobiográficos pero, la astilla biográfica aparece como recurso dramático, como purificación también.

–Alguna vez hablamos de que muy pocos escritores permanecen. ¿Usted escribe para el recuerdo o la poesía es una lucha contra el olvido?

–Escribí para los amigos en la adolescencia, para llamar a un oscuro dios, para saber de mí, para dar cuenta de un hacer y un ser en el mundo; escribí, escribo por razones vitales… el concepto de posteridad me suena a -según Céline- un discurso a los gusanos…

–En varios poemas, hay sujetos o personajes que pueden calificarse de obreros o de trabajadores. A la hora de pensar un poema, ¿le han interesado ciertos tipos humanos?¿ O sus poemas responden a cierto contexto obligado, como si fueran una forma expresiva del entorno? ¿O no y la poesía es mera forma, última elegía del yo?

–En los 15 o 20 primeros libros que publiqué hubo una recurrencia a las clases populares, a los desposeídos porque esa es la realidad que viví e intenté comprender/reflejar, después el registro devino en libros que, tratan más lo espiritual, lo filosófico y los problemas de la poesía. La poesía no es ni debería ser, mera  forma. El concepto de “oficio” me resulta de una mediocridad impar

–Me parece que hay un cruce extraño en su poesía. A la vez, leo una especie de realismo desenfadado y un simbolismo expresivo, expresionista. Hay un fuerte trabajo con la elipsis y el ritmo y cierto hermetismo lingüístico, solapado. ¿A usted qué le parece? (pienso en “Serie americana” y en “Escuela industrial”, por ejemplo)

–El asunto del ritmo me preocupa más que el de la melodía, importa la respiración del poema, su decir como soporte de su expresar. Más que desenfado diría: humor, ironía, sarcasmo. Le agradezco su lectura de lo expresionista –que nadie advirtió hasta ahora – y es cierta; el expresionismo en literatura y artes visuales me exalta.

–¿Que poetas recomienda leer?

–Es urgente leer en primer lugar los poetas de nuestra lengua, región, país y continente; en la arbitrariedad de todo gusto citaría de Córdoba a Romilio Ribero, Alejandro Nicotra, Elena Annibali, del país a Juan l. Ortiz, Bayley, Raúl Gustavo Aguirre, Susana Thénon, Carlos Vladimirsky, Fijman, Luis Benítez, Dolores Etchecopar, Mastronardi, Molinari, Olga Orozco, de América Latina a César Vallejo, Pablo de Rokha, José Emilio Pacheco, Gonzalo Rojas, de España a Miguel Hernández, Leopoldo María Panero, Antonio Gamoneda y luego Ginsberg, Dylan Thomas, Pound, Hölderlin, Novalis, Trakl, Rilke, Leopardi, Rimbaud, Quasimodo, Montale, Poe …

–“A la poesía le di mi corazón”, dice en ese largo y emblemático poema autobiográfico (que había permanecido inédito). ¿Y la poesía qué le dio? ¿Le dio algo? ¿O es una señora que lo alzó “sobre el pozo del mundo” y lo soltó?

–La poesía no tienen por qué “dar” nada, está ahí como la lluvia o las estrellas…uno le roba o agrega a su tesoro –que es el del viento, el de las fosas abisales -las propias vacilaciones, algunos papeles quemados en lo oscuro. Sí, me alzó sobre el mundo esa señora y me soltó, todavía estoy esperando que me busque, me pida perdón.

En tres líneas

1- Schmidt nació en Villa María, Córdoba; el 3 de mayo de 1955.

2- Es poeta, editor y periodista cultural argentino. En 1982 funda y dirige diversas revistas literarias, como Luna Quemada, Huérfanos, El Gran dragón rojo y La mujer vestida de sol.


3 - A modo de libros, plaquetas, folletos y cuadernillos publicó más de 40 textos de poesía. Integra más de 50 antologías del país, América Latina y Europa.

lunes, 12 de diciembre de 2016

NATIVIDAD








ALREDEDOR DE UN FUEGO FRÍO
SE PROMETEN LOS CORDEROS

adiós/restos del pequeño amor/adiós cantante

adiós

restos del pequeño amor
adiós cantante prosecución camino
adiós elefante del mundo sumergido
adiós ojos de primera vez
en tus imágenes
adiós en repentino infinitivo


hola

gran calamar que arrecia
hola tocón en la puerta
el tren del peligro ya ha pasado
se escucha el gritón de lo fantasma

tal vez
El viento siempre sabe dónde va
y cuando no
destruye las cosas de los hombres


Qué nos pasa?
El ángel dijo sí …
estamos mirando las ofertas


Hay varios modos de sumar
uno solo
resta

según

se rehabitó o descansa
según los abogados del letrado
abren los Alpes marítimos
cierran la luz el lavadero


adiós la búsqueda
familiar del no
crepúsculo sabido


se claro/adiós premura/cartapacio/fiesta
y todos los que llegan
los olvidados todos

arrumban /se destinan

hola conspiración
voluntad secreta

tal vez en otra vida
quizá en lo muy muerto

seamos claros

hubo
no hay

nunca jamás.


El viento siempre sabe dónde va









y cuando no

destruye las cosas de los hombres

viernes, 9 de diciembre de 2016

ALDO PELLEGRINI ( 1903 - 1973)

A ratos me da la impresión de que la poesía es algo que se destruye en contacto con la vida sórdida, con los individuos sórdidos y que éstos son los fuertes y positivos. A veces hasta me parece que la poesía se destruye simplemente en contacto con el aire libre y que su gran destino es vivir silenciosamente en el interior de los hombres. ¿De qué barro de soledad estamos formados?"



Carta a Julio Llinás  - 13 de noviembre de 1952

jueves, 1 de diciembre de 2016

Hace más de 6 años Valeria Cervero sugirió


Hoy quiero compartir una lista de blogs en los que varios poetas difunden poesía de otros. En ciertos casos se trata de autores argentinos y en otros de traducciones que por lo general hace el administrador del blog. Varios de uds. ya los conocerán todos, otros descubrirán alguno que todavía no conocían y habrá quienes recién los descubran en general. No van en un orden de importancia, sino que más bien se acomodan a lecturas que estuve haciendo. Más allá de la cantidad de material de cada blog, aspecto en el que difieren, en todos van a encontrar lecturas excelentes para apasionarse en este domingo frío, y también otros días. Gracias a todos los que hacen posible esta lista por la poesía que puedo disfrutar todos los días.
Queda para otra vez la sugerencia de otros blogs donde los poetas difunden sus propios textos.



Poetas argentinos (Germán Arens): http://misrespetosalossiguientespoetas.blogspot.com/

El placard (Sandra Toro): http://el-placard.blogspot.com/

Denise Levertov en castellano (Sandra Toto): http://deniselevertov.blogspot.com/

Pregúntale al señor de la noche qué noche es esta (Natalia Litvinova): http://animalesenbruto.blogspot.com/

Romanticismo y verdad (Alejandro Schmidt): http://romanticismoyverdad.blogspot.com/

Palabra argentina (Alejandro Schmidt): http://palabraargentina.blogspot.com/

otra iglesia es imposible (Jorge Aulicino): http://campodemaniobras.blogspot.com/

El mundo incompleto (Irene Gruss): http://elmundoincompleto.blogspot.com/

blog del amasijo (María del Carmen Colombo): http://blogdelamasijo.blogspot.com/

Poesía del mondongo (Fernando Delgado): http://poesiadelmondongo.blogspot.com/

Estación Quilmes (Valeria Assenza Parisi y Fernando Delgado): http://estacionquilmes.blogspot.com/

El poeta ocasional (Pedro Donangelo): http://elpoetaocasional.blogspot.com/

La biblioteca de Marcelo Leites: http://ustedleepoesia2.blogspot.com/

el escaramujo (Myriam Rozenberg): http://elescaramujo.blogspot.com/

Las afinidades electivas/Las elecciones afectivas (Alejandro Méndez): http://laseleccionesafectivas.blogspot.com/

de sibila y pitias (Silvia Camerotto): http://desibilasypitias.blogspot.com/

Aromito (José María Pallaoro): http://aromitorevista.blogspot.com/

La trampera (Miguel Martínez): http://latrampera.blogspot.com/

Bloggrito (Maritza Kusanovic): http://bloggrito.blogspot.com/

Macedonianos 2010 (Roxana Palacios y taller Macedonio Fernández): http://tallermacedoniofernandez2010.blogspot.com/

Proyecto Poesía Patagonia (Claudia Sastre y otros):http://www.proyectobibliotecapatagonica.blogspot.com/

Griselda García: http://griseldagarcia.blogspot.com/

Árbol de libros (Marisa Do Brito Barrote): http://marisdobrito.blogspot.com/

El trabajo de las horas (Pablo Anadón): http://eltrabajodelashoras.blogspot.com/

Universo veniaca (Julia Magistratti): http://veniaca.blogspot.com/

Tratado de cuerpo (Marcelo Carnero): http://tratadodecuerpo.blogspot.com/


El ángel dijo, sí





¡adiós perfiles venerados
regresan, estos vientos!

el árbol torcido de la gracia
derrama luz
en salitra les

¡adiós presagios
bares descalzos!

nombrabas el bosque
como un cuerpo
sombra del prodigio traicionado

¡adiós merienda entre visiones!

nuestra conversación
derriba su castillo

el ángel dijo

sí.

martes, 29 de noviembre de 2016

viste cuando quedás afuera de todo?







limpio el mundo de los muertos / muda la espiga de lo santo
adentro de un invierno tibio


entonces
sin soledad
ni espera

 aparece la estrella

 luz que imanta los demonios





lunes, 21 de noviembre de 2016

el diablo





sobre el puente de oro
donde ofrecemos
lo mejor


esa rama de hielo.





del libro, El ángel dijo sí.

domingo, 13 de noviembre de 2016

ya no recuerdo cuando fue el último día en que no me dolió nada



si vos lo recordás
serás muy joven o muy mediocre
o acaso
no conociste esa experiencia
o sí
pero fuiste a la farmacia
y después
 hubo música
un cielo prometido
por ejemplo


largas noches en que yo era un barco de longfellow
y cruzaba
vigoroso
la incomprensión




jueves, 10 de noviembre de 2016

Único habitante



Mi casa ahora está frente al consulado de Ecuador
No es como mi casa al lado del Seminario
O mi casa arriba de un canal de televisión
O aquella esquina del universo que alguna vez
O la hermosa casa frente al colegio san Antonio
Pero mi casa sos vos
Y la luna un montón de agua distraída

Y esos proféticos inquilinatos del lector
Y tantas llaves nuevas porque no hay
Donde abrir lo que no cierra

Mi casa frente al ferrocarril
Mi casa al revés del centro espiritista

Hay un montón de casas
La ciudad eras vos
Antes de ser
Un terrón acuoso y suficiente

Qué largo es el día en la inclemencia
Que profundo el aire
Cuando sale el ser
Rumbo a humedales de palabras
A su precario hogar en el lenguaje

En ocasiones
me confundo
Creo ver
castillos
tibios panales de la china septentrional
Y sé que me confundo
Palpo la oscuridad de esas paredes
Cómo lo se
Porque en mi casa
Hay unas manos arriba de una mesa
Y adentro de esas manos
No entra el mundo
Entro yo

Sin mundo.

martes, 8 de noviembre de 2016

se dice una vez




se dice una vez se dice otra y otra otra, dormido solo, con uno dos que escuchan, que no escuchás, se dice una vez y otra, se va la soledad, el silencio se va, los otros, el otro se va

y sigue diciendo

para que vuelvan dice?
para que no vuelvan?

para que se queden como un árbol sufrido de belleza o no?
de tatuaje o no?
de quemadura y sombra o sí?

no hay
no pudo haber
ni hubo
destino voluntad en esto

se dice como si no hubiera nada más
nada más nada más que menos
que el mar
qué más

no se repite no se mitologiza metaforiza perversea
si tiene sed dice la sed
si tienen uñas muestra las uñas
si lleva amor lleva amor lleva la valija la señora la patria
pero nunca no nunca
lo que dijo y decía y ya no dirá
no ya no dirá
aunque en su lugar
(abandonado caído manchada la palabra
diga de sí misma como quien muestra su intestino
su estrella
su pasado pisado)

escuchó lo que dice?
(una voz chiquiiiita de la quinta del ñato
de la infancia
de haber buscado piedras en la orilla?
de haberse mojado los zapatos?

de un viento graaaande
que sólo el
o ella
o los renacidos?)

y mucho se expandiera  concentrara según casi afirman del universo los que no saben qué saben
como una piedra (y no lo dice)
una mirada (y no lo dice)

y en los sepulcros en los anatemas
en los exilios
trabaja lo dicho?
obstinada
precariamente?

trabaja hasta hacerse un cuerpo una jaula una nube
o una copiosa masacre de la luz?
hasta eso
 trabaja?

o es música de tontos por el campo
o animalidad o Grecia
descansa lo que dice cuando dice
una vez y otra una vez y otra

en la casa del ser del parecer
acontecer?
perecer?

escapado del cuerpo?
de la red acromegálica del sentido?

se dice una vez
se dice otra
otra
otra


infinito es el oído de la piedad
y cruel
y bienvenido como las mantas
los caballos y el instante desierto donde algo o alguien o algunos

calla.

JULIO CASTELLANOS (CÓRDOBA,1947)




DE FLORA URBANA



Casi a la puerta del lugar donde vivo
hay un naranjo
que da frutos amargos de un pálido amarillo.
En la vereda de enfrente,
una gigantesca rosa china.

El naranjo fructifica en invierno,
la rosa china florece al esplendor del verano.
No coinciden.La calle los separa.

Alguna vez un gajo de naranjo
adornó las paredes de mi casa.

(Alguna vez las rojas rosas chinas
vivieron en el cuenco de tus manos,
vibraron al calor de tu pecho).

Todo lo otro es ajeno.
Lo único que atienden
es su propio acontecer,su ser sin nadie.




de Naranjas amargas - El Espejo Ediciones - Córdoba - 2016

domingo, 6 de noviembre de 2016

A Prestes (mi galgo)




Has muerto, silencioso amigo mío, has muerto...
¿En qué prados profundos te hundiste para siempre cuando llovía oscuramente?
- Marzo, anoche, apagaba la sed larga...

Tu cabeza, tras el último suspiro, quedó más fina aún en la línea final.
Y era como si corrieras acostado un no sé qué fantástico que huía, huía...

Silencioso amigo mío, viejo amigo mío, has muerto...
Cuántos minutos claros, cuántos momentos eternos, contigo,
compañero de mis mañanas cerca del agua, de mis atardeceres flotantes...
en el dulce calor, en el viento de las hierbas, en los filos del frío,
en la luz que se despide como un infinito espíritu ya herido...

Silencioso amigo mío, viejo amigo mío, cómo nos entendíamos...
Esta tarde hubiéramos salido a mirar los oros transparentes, casi íntimos...
¿Qué veías allá, sobre las islas, cuando enhestabas las orejas?
¿Y te tocaba el blanco alado de la vela lejana?
Oh, los perfumes de las gramillas y de la tierra, qué ríos de éxtasis!
Y tu tensión cuando algo corría abajo...
Duro de mí, estúpido de mí, que te contenía sobre las traseras patas sólo,
vibrante en tu erguida esbeltez posada apenas...

Silencioso amigo mío, viejo amigo mío, compañero de mi labor...
Echado a mi lado, las horas lentas, alzabas de repente tus ojos largos,
ay, llenos de signos sutilísimos, y a veces,
una tenue luz que venía no se sabe de dónde humedecía su melancolía sesgada...
¿En qué secretas honduras sentías entonces mi mirada?

(Qué distraídos somos, qué torpes somos para las humildes almas que nos buscan
desde su olvido y quieren como asirse de una chispa, siquiera ínfima, de amor...)
Se hubiera dicho que emergías dulcemente de un seno desconocido
y que una serenidad ligera te ganaba así un extraño mundo seguro...
El noble hocico, luego, se aguzaba todavía más entre los delgados remos, contra el suelo,
en esa actitud de los cuadros antiguos, de un triste husmeo extático...

(...) De mirar tu estampa se sabía que tu sangre venía de lejos, de muy lejos,
no del rubio país sino de los desiertos arábigos, por tu finura barcina.
Perfecto de gracilidad y fuerza, tus menores gestos decían
de una añejísima nobleza ganada sobre las arenas tras las gacelas de luz.
Todo en ti se concertaba como en un poema para un vuelo rasante de flecha,
y eras tensión ceñida o libre igual también que en un poema....
Tu infancia fue feliz de saltos y juegos con el Dardo, tu amigo,
el lebrel aquel de Italia muerto trágicamente en una lucha desigual,
y no había cañadas anchas ni árboles juntos para la casi alada geometría de tus vértigos,
ni había corriente poderosa para tu pecho afilado y tu flexible gracia serpentina...

Cerca del río inmóvil, allá, empezamos a querernos en los silencios pálidos
llorados por los sauces medrosos o subrayados frágilmente por los plátanos...
Sobre los caminos, medio idos ya, tu marcha, a mi lado, era leve, de fantasma...
Y acaso tú también recogías lo que decían los follajes entre las flores de arriba y abajo que nacían...
El idílico sol de la ribera nos encontraba siempre puntuales, junto a las primeras cañas de pesca,
y el arrabal de la costa cuando la brisa última lo ajaba, ¿era sólo de sueño?
Oh, las figuras hieráticas de los pobres portoncitos de ramas
y los chicos mudos, espectrales, atravesando el baldío hacia el rancho de la orilla...
tu juventud fue luego de anchas pistas, de los grandes potreros con cardos de Carbó...
En la mañana iluminada de cardos caminábamos esquivando las espinas,
-una culebrilla, de repente, irisaba su rápida cinta a nuestros pies-
tú más cuidadoso y desconfiado que yo, levantando delicadamente las patas,
pero algo saltaba cerca y el alambrado entero sonaba como un arpa,
cuando no lo sobrevolabas y eras todo vueltas breves, increíblemente elásticas...
-Celebraba, mi amigo, que la liebre, al fin, no fuera tuya...

Larga fue tu enfermedad y tu latido profundo se hizo delgado, casi una queja ya...
Oh, esta queja, oh, tu llamado débil, cuando sentías acaso que “la sombra” venía
y requerías a tu lado las familiares presencias queridas...
Duro de mí, estúpido de mí, que a veces no prestaba suficiente atención a tu llamado
ni lo entendía en su miedo de la rondante noche absoluta, de la marea definitiva,
miedo de hundirte solo, sin la luz del “aura” amada junto a la ola fatal,
tú, el de la adhesión plena, el de la estilizada cabecita beata sobre la falda, sentados a la mesa
o leyendo yo sin haberte mullido el sueño fiel al lado de la silla...

Ay, oigo todavía tu llamado, tu llanto débil, impotente, de una imploración seguida...
Las voces no estaban lejos pero las querías alrededor de ti contra el silencio que llegaba...

Ay, oigo todavía tu llamado, tu súplica latida como desde una medrosa pesadilla,
mientras mi corazón lo mismo que tus flancos, sangra, sangra,
y Marzo, entre las cañas, sigue lloviendo sobre ti...




 de La brisa profunda (1954) Juan L. Ortiz  (1896 - 1978 )

jueves, 27 de octubre de 2016

AQUEL FAMOSO TIEMPO DE VIVIR



cuándo llegará aquel famoso tiempo de vivir (*)



me  leen en la salita de alfombras (1)
adentro de un pañuelo gremialista
me leyó toda la vida Oscar
(el de la furia)
en Cracovia
donde gruñe
 ese pobre corazón
porfiado
leían

del ayer se todo
salvo cómo hace la nieve su pasar
o quién respira adentro de montañas
(no soy pariente de la nieve
ni huésped
 de montañas)

compartiendo la mesa con el vampiro mayor de la argentina
una cantante
graznó
el ayer no sabe nada de nosotros

el problema del tiempo que es el problema de la memoria
es decir
de alguna re-creación del olvido

(al modo de Palladio
… aquellas estatuas redondas que trituraban para obtener cal en la Roma del siglo XV…)

en el sentido de la muerte
del testimonio inmóvil
el ayer es capitalista de nosotros
porque el ayer es boca de ballenas

tardísimo en la noche de las distopías
Len Deighton
te descansaba de Mishima
pensás que ellos
enjuagarían tus lágrimas más rápido que ahora mismo?


la única pregunta de juanele
el multiple choice de gelman
tu propia, legítima y bien establecida patética de enigmas
encenderían una luz para no ver? (2)







(*)Osvaldo Rodríguez Musso, más conocido por su apelativo de Gitano Rodríguez (Valparaíso, Chile, 26 de julio de 1943 - Bardolino, Italia, 18 de marzo de 1996).

(1)     mezquita El Masjid al-Haram

(2)     Antonio Porchia