miércoles, 28 de enero de 2015

César Aira y los escritores que no escriben

Lo que pasa es que hay muchas personas que, cuando dicen en su juventud "yo quiero ser escritor", en realidad lo que quieren es funcionar socialmente como escritores, eso es lo que les gusta. Tener el carné como para poder opinar, ir a congresos, tener una figura social profesional. Y encuentran que el problema que plantea eso es que tienen que escribir, cosa que no les gusta. Entonces escriben un libro cada diez años, con un gran esfuerzo, o recopilan artículos de manera que mantienen en vigencia su carné de escritor. Por eso muchas veces he dicho, cuando me preguntan por esto, que no me gustan los escritores que no escriben. Porque veo que hay escritores que funcionan como escritores y que en realidad no son escritores de vocación. Y en mi caso, que he publicado tantos libros, pequeñitos pero tantos, hay como un rechazo contra mí por ser muy prolífico. Un amigo me decía, cuando le dije que venía a México a participar en cosas públicas: "Llevá un revólver, y cuando empieces a hablar, ponelo sobre la mesa y decí: la primera vez que se pronuncie la palabra 'prolífico', me pego un tiro. Así los vas a tener controlados". Porque prolífico ahora se ha vuelto un término despectivo. Si es prolífico, no puede ser bueno. Pero eso viene justamente de todos esos escritores que no escriben y que se defienden así. ¿Qué otra cosa puede hacer un escritor que escribir? Es decir, si lo que escribe se publica, es porque hay algún interés en publicarlo, algún editor interesado, algún lector interesado en leerlo. Así que no veo el motivo para despreciar lo prolífico.



En una entrevista realizada por Pablo Duarte para LETRAS LIBRES,en México D.F,2009

jueves, 22 de enero de 2015

el problema es que usted llega a su casa






adiós fundación de lo remoto

cepillo interjección pantalla

comprendo

(me reitero)



éste es el día pesado y medido que el Señor nos dio



adiós música continua

producto

estar



la solución no es irse

la tentación es

irse



adiós vocablos admirables

colgados de un cuello que no traga



porque debemos

a cierta altura

salirse a despedir



el problema es que usted llega a su casa

y no lo sabe

confunde puerta con el sótano

la nieve y el jilguero





qué demorado

qué afín

qué vacilante

si es todo tan neto tan banal

la tumba el muro



adiós poetas armados de palabras

adiós recetas y moluscos



ahora es el momento

casi siempre es el momento



el problema es que usted desea averiguar.








sábado, 10 de enero de 2015

MUDARSE en infinitivo



Dejar un apartamento. Desocupar una casa. Levantar el campo. Despejar. Ahuecar el ala.
Inventariar ordenar clasificar seleccionar
Eliminar tirar vender
Romper
Quemar
Bajar desellar desclavar despegar desatornillar descolgar
Desconectar soltar cortar sacar desmontar doblar cortar
Enrollar
Empaquetar embalar apretar anudar apilar juntar amontonar atar envolver proteger recubrir cerrar apretar
Recoger llevar levantar
Barrer
Cerrar
Marcharse


George Perec (Francia,1936 - 1982 )

traducción ; Jesús Camarero