jueves, 13 de septiembre de 2012

ARTAUD - EL PESA- -NERVIOS



Toda la escritura es una inmundicia.
las personas que salen de la vaguedad para tratar de determinar lo que sea de lo que ocurre en sus pensamientos son unos cerdos.
Toda la gente literaria es cerda y la de esta época especialmente.
Todos aquellos que tienen refugios en el espíritu,quiero decir en un cierto lado de la cabeza,en lugares bien localizados de su cerebro;todos aquellos que son dueños de su lengua,todos aquellos para quienes la palabras tienen un sentido,todos aquellos para quien existen alturas en el alma y corrientes en el pensamiento,aquellos que son espíritu de la época y que han clasificado esas corrientes de pensamiento; pienso en sus tareas precisas,y en ese chirrido de autómata que produce su espíritu en cualquier parte;

son unos cerdos.

Aquellos para quienes ciertas palabras tienen un sentido y ciertas maneras de ser,aquellos que hacen cumplidos tan bien,aquellos para quienes hay clases en los sentimientos y discuten sobre un grado cualquiera de sus ridículas clasificaciones, los que creen aún en "términos", aquellos que agitan ideologías que tienen prestigio en la época,aquellos cuyas mujeres hablan tan bien e igualmente esas mujeres que hablan tan bien y que hablan de las corrientes de la época,aquellos que aún creen en una orientación del espíritu,aquellos que siguen sendas,que agitan nombres,que hacen gritar las páginas de los libros,

esos son los peores cerdos.

¡Sois arbitrario, joven!

No, pienso en críticos barbudos.

Y ya os lo he dicho : nada de obras,ninguna lengua,ninguna palabra,nada de espíritu, nada.

Nada,solo un hermoso Pesa - Nervios.

Una especie de estación incomprensible y bien erguida en el centro de todo espíritu.

Y no esperéis que os nombre ese todo,en cuántas partes se divide,que os diga su peso,que engrane, que me ponga a discutir sobre ese todo y que,discutiendo,me pierda y me ponga así sin saberlo a PENSAR y que se aclare, que viva,que se vista de multitud de palabras todas bien impregnadas de sentido,todas diversas,y capaces de aclarar bien todas las actitudes,todos los matices de un pensamiento muy sensible y penetrante.
Ah esos estados que jamás se nombran,esas eminentes situaciones del alma,ah esos intervalos del espíritu,ah esos minúsculos frustrados que son el pan cotidiano de mis horas,ah ese pueblo rumorosos de datos, son siempre las mismas palabras que me sirven y ciertamente no parezco moverme mucho en mi pensamiento,pero me muevo más que vosotros en realidad,cabezas de asnos,cerdos pertinentes,maestros del falso verbo,cambalacheros de retratos,folletinistas,rastreros,herbarios,entomólogos,llaga de mi lengua.

Os lo he dicho ya : que no tenga más mi lengua,ésa no es una razón para que vosotros persistáis,para que os obstinéis con la lengua.

Vamos , dentro de diez años seré comprendido por aquellos que harán hoy lo que vosotros hacéis.Entonces se conocerán mi geyseres,se verán mis hielos,se habrá aprendido a desnaturalizar  mis venenos,se descubrirán los juegos de mi alma.

Entonces todos mis cabellos estarán fundidos en cal,todas mis venas mentales,entonces se percibirá mi bestiario,y mi mística se habrá convertido en un sombrero.Entonces se verán humear las juntas de las piedras y ramos arborescentes de ojos mentales se cristalizarán en glosarios,entonces se verán caer aerolitos de piedra,entonces se verán sogas,entonces se comprenderá la geometría sin espacios y se aprenderá lo que es la configuración del espíritu y se comprenderá también cómo he perdido el espíritu.

Entonces se comprenderá porqué mi espíritu no está aquí,entonces verán agotarse las lenguas,desecarse todos los espíritus,endurecerse todas las lenguas,las figuras humanas se aplastarán,se desinflarán,como aspiradas por ventosas secantes,y esa membrana lubricante continuará flotando en el aire,esa mebrana lubricante y cáustica,esa membrana de dos espesores,de múltiples grados,de grietas infinitas,esa membrana melancólica y vítrea,pero tan sensible,tan pertinente también,tan capaz de multiplicarse,de desdoblarse,de volverse con su reverbero de grietas,de sentidos,de estupefacientes,de irrigaciones penetrantes y venenosas.

entonces todo esto les parecerá bien.

y ya no tendré necesidad de hablar.


según la versión publicada por Ediciones de la Gárgola -Buenos Aires - 1983 - Traducción de Cristina Depau.


No hay comentarios:

Publicar un comentario