a lo largo de 40 años me ha llamado
la atención la miseria de los cortesanos que ante la merecida diatriba responden
con una especie de herida emocional y buenas formas; en fin, esas maneras son las que les permitieron los
carguitos, las bequitas y vaya a saber uno cuanto resbalones en la escalera de
la dignidad…
algún día, cuando despierte con el
suficiente buen humor ( que estas son cosas para risa y no para lamento)
publicaré las notas privadas, públicas, semipúblicas, las cosas dichas en
lecturas, conferencias etc. y además el silencio de estos señorones o sus
réplicas con guantes o con el tufillo de pánico a alguna verdad y al decir verdad
me refiero al ansia de alguna pureza, cierta gratuidad…valor en vez de precio
inolvidable me resulta un pelotudo
que después de manipular eso que acordamos en llamar, poesía argentina
contemporánea –en un medio y ahora en otro un poco más chiquito- se mandó, con
solemnidad un reconocimiento de sus
porquerías…
recuerdo otro, por el estilo,
al reclamarle respuesta por teléfono
aclaró que ,el mail –enviado por mí – tenía bichos (y los tenía sí, pero no cibernéticos)
basta vivir para ver cómo ,en la
medida que se ponen viejos y ya no pueden mentir con su futuro, se van acomodando en la grisura, el sueldo, las
instituciones
y comienzan reuniones de fantasmas
sublimes jubilados de la nada
agrego
lo bizantino
todo el barroco de la mediocridad…
equivocaron afición con vocación y papel de diario con granito de eternidad
babosas, caranchos, gusanos cadavéricos
con esa retórica vacía de tantos políticos
en el basurero de la historia
es que
saben?
practican la maledicencia y sólo
conocen el coraje del ósculo (y es un coraje sí, porque han lamido cada órgano)
cuando eran más joven
(ventajas trae el tiempo y no
sabemos)
sufrí a estos partícipes del complot
criminal contra lo bueno ( lo bueno? digo, el genio, el santo, el héroe, el mártir,
el talentoso, el esforzado, el pródigo)
en mi inocencia los consideraba
individualmente,
y no,
son raza de enanos, jorobas, flatos
un fenotipo
la marca en la arena.
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