los grandes desconocidos llegan a pie
la Sombra los hace aguardar
están preparados
su paciencia es la del humo y la nieve
hasta que suena el timbre
la mayoría se divierte
y entonces
y entonces
qué susto
qué apuro
qué miradas
los grandes desconocidos
se despojan
cae la negación, la soledad, la rabia
gran señor el futuro
espléndida su capa
de acertijo
hacé lo que quieras
siempre
en lo hondo del siglo
una lechuza
llama
llama
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